El Sevilla ha perdido el norte. Estamos cuartos y, aunque seguimos dependiendo de nosotros mismos para clasificar en puestos Champions, no se adivina dónde está el final de esta crisis. Sampaoli declaró ayer en rueda de prensa que la eliminación de Champions ha sido un golpe duro de asimilar. Probablemente tiene razón. Pero no es menos cierto que hemos perdido o empatado partidos en Liga que un equipo que compite por estar lo más alto no puede permitirse. Los jugadores han dejado de creérselo, ya no tiene el brillo ni el arranque de hace meses. Se ha perdido el "swing". Tiene mucho trabajo Sampaoli por delante. Entrar de nuevo en Champions es nuestro único objetivo ahora. Y hay que poner ya toda la carne en el asador.
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