Copa del Rey. Sevilla 2-2 At. Madrid: no hay atajos para Europa

El planteamiento de Emery para el partido de anoche, en el que el Sevilla se jugaba bastante más que el pase a una final de Copa, fue desastroso desde el inicio al fin. En vez de diseñar un esquema eminentemente defensivo -porque era imperativo mantener la portería a cero- adelantó todas las líneas sabiendo, como debería saber, que el Atlético está basando su campaña de juego en el contragolpe fulminante. Y así nos fue. Todo lo demás, incluidas las autoexpulsiones de Medel y Kongdobia -qué desilusión, parecía más listo- es ya historia.
Se equivocó también la presidencia del club, calentando absurdamente un encuentro al que deberíamos haber llegado en silencio y con humildad porque la eliminatoria estaba perdida en el partido de ida. Cada vez que hablamos de leones, nos comen por sopas. No aprendemos.
Ahora hay que sacar enseñanzas, y la principal es que el camino hacia Europa no tiene atajos, que hay que salir a ganar todos los domingos, todos los partidos, que sólo con el esfuerzo callado y cotidiano se logran las grandes metas, y así son las cosas. Una desilusión enorme, pero nada que no supiéramos o intuyéramos de antemano.