Sevilla 1-3 At. Madrid: esto todavía no es un equipo

No nos hemos llamado a engaño en ningún momento. La ilusión por la nueva plantilla estaba clara. Ayer hubo tres cuartos de entrada en el Pizjuán, un 18 de agosto a las once de la noche. Pero es evidente que la calidad individual de alguno de los fichajes que se han hecho necesita el complemento de un juego en equipo que, de momento, es absolutamente inexistente. Cuesta mucho trabajo creer que el equipo que venció al Manchester Utd. es el mismo que ayer mostró debilidades fatales ante un Atlético de Madrid, que no mereció la victoria. Pero es que no hay equipo, todavía. La calidad de Marin, de Bacca, de Gameiro, de Rakitic, o de Kondogbia -que, lamentablemente, está en el disparadero de salida- necesita ser encauzada en una estrategia y planteamiento que Emeri todavía no ha depurado. Sería triste que después del esfuerzo en fichajes que se ha realizado, ahora fuera el entrenador el problema. Pero el Sevilla de anoche tenía exactamente los mismos problemas en defensa que hace uno o dos años. Un coladero, vamos. Fazio estuvo fatal. Necesitamos dos centrales como el comer. No hay conexión entre líneas, y Marin, un pedazo de futbolista, o Bacca, incluso Gameiro, necesitan conexión, que les lleguen balones claros y no forzados, reposados. En fin, queda mucho, pero mucho trabajo por delante. Vamos a esperar y a confiar. Por cierto, Vitolo no convence. Lento, impreciso, lentísimo. Parece que le sobran incluso algunos kilos. Muy mal.