Sevilla 1-2 Villarreal: ¿hay alguién al mando de este naufragio?

No lo parece. Al pobre de Francesco Schetino, el del Costa Concordia, le gritaban desde la comandancia: "Vada a bordo, comandante, vada a bordo subito". Aquí, la afición ha gritado hoy varios hermosos cánticos: "Hasta los huevos, estamos hasta los huevos", "Súbete el carnet, súbete el carnet, súbete el carnet", y "Marcelino dimisión". Luego ha habido pañuelitos. La pregunta sigue en el aire: ¿Hay alguién ahí? ¿O esto va a la deriva sin tripulantes en el puente? ¿Dónde están los tripulantes? ¿No le han renovado cinco añitos a Monchi? ¿Por qué no da la cara Monchi? ¿Es intocable Monchi? ¿No es responsable de este fiasco? ¿No es el que ha dilapidado decenas de millones de euros en fichajes inútiles? Undécimos, undécimos, undécimos. Sólo falta añadir otro cántico: "A la Champions, oé, a la Champions, oé, a la Champions, oé, vamos pa la Champions de una vez". Será por fijar objetivos...