Sevilla 0-0 Valencia: exceso de precauciones

En un partido en el que el Sevilla fue de menos a más, el Valencia se llevó un punto valioso gracias a una eficiente defensa que impidió a los nuestros acercarse con peligro a su meta. Cuando en el segundo tiempo la línea defensiva sevillista comenzó a adelantarse y apoyar con los laterales la labor de Navas y Adriano, y luego la de Capel, el Sevilla se mostró mucho más incisivo y desequilibrante. Cuando todas las líneas del equipo juegan, el Sevilla muestra peligro. Cuando la defensa se queda rezagada, el centro del campo no es capaz, por sí mismo, de engranar el juego de los delanteros. Duscher, corta y destruye el juego contrario, pero no organiza el juego blanco. Maresca sigue lento. Romaric entra en calor a la media hora de juego. Navas es incansable, pero el centro de balón sigue siendo su talón de Aquiles. Hace falta más valentía. La teoría de que la puerta propia debe quedar siempre a cero, se puede volver en contra del Sevilla. Lo que hace falta es marcar goles y que todas las líneas se impliquen en el ataque. La escalada al Everest no ha hecho más que empezar.