En un partido malo de solemnidad, aburrido, sin ningún interés ofensivo por parte de los dos equipos, el Sevilla se ha dejado dos puntos de oro con el colista que, al final de la Liga, necesitará. Sólo un gol de Navas, el único que corre de verdad en este equipo, y un posible penalti a Kanouté más un tiro de éste, que incomprensiblemente se fue al palo, fueron los únicos argumentos de ataque que mostraron los de Jiménez. Al final, un correoso Osasuna, amparado descaradamente por un árbitro inútil y una teatral y dramática actuación de sus jugadores, que se pasaron más tiempo pidiendo asistencia de los masajistas que jugando al balón, se llevó un punto que consideramos justo. Que los Magos de Oriente traigan inspiración a nuestros jugadores, al entrenador, al Director deportivo y al Consejo de Administración, porque como sigamos en esta senda de mediocridad no va a haber ni cuarto, ni quinto, ni sexto puesto que valgan. Creemos que hay que tomar medidas ya, sí o sí.
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5 comentarios:
Voy a acabar creyéndome que, de verdad, hace falta alguien que motive a estos jugadores, porque dejarse empatar en el minuto 91 es de falta de concentración y falta de motivación, faltando segundos para acabar el partido tenemos que estar encima de la pelota, dominándola, durmiendo el partido, y no dejar que el Osasuna lleve la iniciativa y remate a placer el gol del empate.
Me ha cabreado mucho. Es evidente que el objetivo de la clasificación para la Champions se nos pone un poco peor, porque por abajo viene apretando el Dépor, mucho más en forma y más motivado.
Al final va a resultar que vamos a agradecer no tener que jugar la UEFA para que no sobrecarguemos a los jugadores de partidos.
Espero que el miércoles cambiemos la cara y avasallemos al Dépor, yo sigo creyendo que el único objetivo realista de este Sevilla es clasificarse entre los 4 primeros y el objetivo para soñar es el de ganar la Copa del Rey.
No obstante, nuestra pasión no depende de los resultados, así que ahora más que nunca, Sevilla FC.
Siempre he pensado que lo mejor para un equipo de fútbol es la estabilidad en el banquillo, el mismo entrenador temporada tras temporada, el baile de entrenadores no nos va a llevar arriba, así que sigo pensando que cambiar de entrenador no es la solución, al menos no lo es si no tengo clara cuál podría ser la alternativa.
Unai Emery, me gusta.
Un entrenador que venga para quedarse, no para llevárselo crudito y a las primeras de cambio hasta luego lukas.
¿Cuándo vamos a volver a tener en el mismo equipo jugando a Luis Fabiano, Kanouté, Renato, Adriano y Jesús Navas?
O ahora o nunca.
Yo no quiero ser flor de un día, prefiero estar siempre en la "pomada" de los 6 primeros a tener altibajos tipo Celta de Vigo (2 años de Champions y luego a segunda) o del Atlético de Madrid (Liga y Copa un año y al siguiente a Segunda), quiero estabilidad y una línea argumental clara, que sepamos a qué atenernos cada domingo.
Muchos regalos para los que hayáis sido buenos.
¡Pero qué cojo.... tienes, Jiménez!
Otra exhibición y van...
Lamentabilisimo espectáculo para un equipo que quiere participar en Champions,¿Con ésto queremos jugarla,cuánto tardaríamos en ser eliminados?
Me expliquen los méritos del señor que ayer nos dirigía o más bien representaba al que dicen que es entrenador en la banda.Temo como ya he dicho en otra ocasión y ojalá me equivoque que asistimos al principio del fin.Lo único que pido es que la mortadela no me la cobren al precio de jamón de bellota,¡ oido Consejo!.
Recibid un fraternal abrazo de Disciplinante
El Sevilla debería hacer una crisis antes de que la Liga se meta en febrero. He preferido no entrar de manera directa en la polémica sobre el entrenador para mantenerme, como Presidente del Foro Sevillista Universitario, más cercano a las posturas institucionales que muchos de nuestros socios observan que en posiciones más críticas. Pero creo que con nuestro silencio o nuestra abstención empezamos a hacer un flaco servicio a nuestro Sevilla, que es, en definitiva, lo único que importa. Creo que hay que cesar a Jiménez. El equipo no está respondiendo a ningún esquema de juego claro y definido desde hace muchos meses. Se ganan los partidos porque somos el segundo equipo más defensivo de la Liga y porque tenemos jugadores de una enorme calidad individual que en una jugada aislada resuelven los partidos. Si no es por esto no hay quien explique nuestra posición en la tabla, que es absolutamente engañosa como ya habíamos advertido hace varias jornadas. Si este Sevilla es verdaderamente grande no pasará nada porque se cambie al entrenador. Si somos, o queremos ser, como el Madrid y el Barcelona de grandes, se cambia el entrenador y se pone solución a un problema que ya no se puede demorar más. Este equipo se está empezando a malograr. Los jugadores tienen calidad suficiente como para ser campeones y para ganar títulos. Si no se endereza la dirección técnica y no se vuelve a acertar con los fichajes, los jugadores querrán irse a otros equipos y comenzarán las discordias que arruínan los banquillos. Se fue Schuster, y el Madrid empezó a ganar y a jugar. Se fue Rijkaard, y ahí tenemos al Barcelona. Hay que tener menos miedo a los cambios de los que empieza a tener este Sevilla que hace año y medio se comía el mundo. ¿Dónde se ha quedado ese hambre de balón que hacía que los once jugadores -hasta Palop corría- agotasen físicamente al contrario? ¿Cuántos balones les roban a nuestros jugadores por detrás -Duscher, Maresca, Romaric, Fazio- los equipos contrarios? ¿En qué cabeza cabe que Palop estuviera perdiendo tiempo en los saques desde que el árbitro pitó el comienzo del partido con el Osasuna? Señores, ¿quién ha perdido la partitura en esta orquesta? ¿es que esta afición -indiscutiblemente la mejor del mundo, y si no que se cuenten los aforos de los partidos de las diez de la noche con la televisión retransmitiendo- ya no tiene derecho a seguir disfrutando? ¿es que hay que esperar otros cincuenta años para volver a disfrutar? ¿por qué tenemos que resignarnos, como dice Pedro Rodríguez Ramos, a volver a ver al Sevilla "de siempre"? Soluciones, señores del Consejo de Administración, que todos estamos sujetos a evaluación en nuestros trabajos y el que no rinde se va a la calle, que el salto de calidad empieza por creerse lo de la calidad. Ya está bien, que esta afición ha cambiado y ya no traga sopas con honda.
Lo que me parece mentira es que todavía haya quien piense que Jiménez es insustituible, que no hay entrenador en el mundo capaz de entrenar a nuestro equipo. Increible.
Lo de ayer no tiene nombre, no hay por donde cogerlo, es el despropósito de los despropósitos, de principio a fin, no solo en el minuto 91.
Y todavía habrá quien diga que el Sevilla es un equipo trabajado tácticamnte y otras memeces.
Ayer tuve que ver el partido por televisión (obligado por la gripe), y los comentaristas no salían de su asombro, sus comentarios rozaban la mofa ("al cielo con ella" decía un "elocuente" Quique Estebaranz, cuando el Sevilla jugaba al pelotazo), y contaban los pases seguidos que conseguían nuestros jugadores.
Lamentable. Y no es que me preocupen demasiado los comentarios de la prensa nacional, que tan poco cariño nos tiene. Lo malo es que tenían razón.
En efecto, socio número uno: las posturas institucionalistas no conducen a nada, y cuando la situación es la que es, hay que denunciarlo, como hay que denunciar la pasividad y complacencia de nuestro actual Consejo de Administración.
El equipo está roto, y los puntos que saca es gracias a genialidades aisladas. Ayer fue un claro ejemplo.
Como dice nuestro amigo Pedro Rodríguez: estamos ante el Sevilla de siempre.
Un abrazo a todos del socio número 87 (Antonio López)
Solo diré que al paso que vamos tendremos que pensar que a Jimenez "que Cojo... tiene" se le van a acer al suelo de lo que le pesan. Como se puede salir dia tras dia a mantener resultados que aun no ha obtenido; en la rueda de prensa con la que nos obsequio por Reyes nuestro afamado trainer, nos recordo el dia del Madrid, pues bien señor Jimenez ese dia, cuando ganabamos 1-3 y nos metieron dos goles en dos minutos porque lo que estaba enfrente era el Madrid y no un equipo cualquiera, usted lo que hizo fue un cambio defensivo sacando al terreno de juego a Federico Facio, y se gano el partido porque tuvimos la suerte de que Roben protesto mas de la cuenta.
¿Que nos acrodemos? ¿dice usted?... esperemos, y esto podria ser una reflexion, que no nos tengamos que acordar demasiado.
Señor Jimenez, los valientes mueren una vez, los cobardes todos los dias.
Un Saludo
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